Hugo Marroquin

6 de oct de 20233 min.

Nadie te contará esto sobre Ámsterdam

Amsterdam ha quedado en la historia como una de las canciones más conocidas y emblemáticas de Jacques Brel. La escribió en 1964 después de visitar la ciudad por primera vez cuando él tendría unos 35 años. Y descubrirás qué es lo que esconde esta canción que ha dejado una huella indeleble en la historia de la música.

Dicen que tras conocer esta ciudad, Jacques Brel quedó profundamente impresionado por la atmósfera única de la ciudad y su vibrante vida nocturna.

La canción captura la Ámsterdam de los muelles y la cotidianeidad de sus marineros desde la mirada aguda y lúcida de un espectador/narrador que cuenta la escena visible: diversión, música, sexo, bailes y prostitutas.

La canción utiliza figuras poéticas para evocarnos y transportarnos a escenas sombrías, hediondas, sórdidas, decadentes y profundamente melancólicas.

El arco dramático de la canción inicia con la mirada casi condescendiente, la imagen de sus barcos, el viento, el océano. Y poco a poco nos sumerge en las noches de excesos para culminar en un alba en la que sus protagonistas logran salvarse, sobrevivirse.

Lo cual parece no suceder para su narrador, que en un giro inesperado deja claro que una mujer le ha sido infiel, le ha rato el corazón, y desde ese lugar de abatimiento es que ha mirado y narrado todo. No estamos seguros que él haya logrado salvarse.

Porque la Ámsterdam de Jacques Brel refleja no solo la hosquedad de sus marineros, sino su desasosiego y su esperanza.

"[Jacques Brel] Nunca hacía encores y nunca hacía bis, excepto una vez, durante la gira por Rusia en 1965: no sé qué le pasó, repitió 'Amsterdam'." Jean Corti

Hay quien dice que las canciones de Brel –debido a la fuerza interpretativa que requieren– son más apropiadas para actores que canten y no al revés.

El video que aparece abajo es un ejemplo de la tremenda fuerza interpretativa de Brel. Sucedió en el mítico Olympia de París. Es la única ocasión en la que el cantante belga la grabó y además puso de pie a los dos mil asistentes presentes en el teatro y seguramente al millón de personas que desde sus casas miraban la transmisión en vivo de Europe 1 por televisión.

Sí, por inaudito que parezca, el hombre que daba más de 200 conciertos al año, solamente grabó una vez esta canción. Dicen que no era una de sus favoritas pues temas técnicos y musicales no le complacían del todo. Uno de sus directores, Jean Corti, dijo: Nunca hacía encores y nunca hacía bis, excepto una vez, durante la gira por Rusia en 1965: no sé qué le pasó, repitió 'Amsterdam'. Y quizás esto en conjunto ha hecho de esta canción un mito, un culto, un ícono.

Escúchala ahora, siéntela y sigue leyendo más abajo.

[Si quieres practicar francés, al final del post está la letra original en francés y una traducción al lado]

He querido hacer una traducción al español de corte más metafórico que literal. Primero porque esta canción no puede entenderse desde la literalidad dado que es profundamente poética en cuanto a las imágenes que sugiere. Es también una canción que genera debates tanto por aquellos que pudo haber significado para Jacques Brel así como por ciertas frases o palabras que resultan ambiguas y dan pie a varias interpretaciones. Así que el texto que propongo es meramente eso, un acercamiento al hispanohablante sobre lo que yo encuentro como imaginario en esta canción.

Referencias:

https://www.lefigaro.fr/2007/07/31/03004-20070731ARTWWW90235-amsterdam_la_chanson_que_brel_n_aimait_pas.php

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